Llamamiento desesperado de Carlos Roldán y Rebeca Skeates , los padres del pequeño Nico. Tiene cuatro años y sigue sonriendo a pesar de la dolencia que sufre. A los nueve meses sus padres empezaron a notar los
primeros síntomas.Dejó de tener tono muscular, y poco a poco ya no pudo ponerse en pie hasta quedarse ya casi sin movilidad.
En febrero del año pasado le diagnosticaron Distrofia Neuroaxonal Infantil (INAD), una patología genética neurodegenerativa que no tiene tratamiento ni cura. Leer mas